José Vadillo Vila
(*)
Un escritor e intelectual de la raza de Mario Vargas Llosa (1936-2025), quien reflexionó sobre los diversos aspectos de la sociedad occidental, quien fue polemista por décadas siempre en el centro del debate público, a la par de gran novelista, es, sin lugar a dudas, un rico «territorio» por explorar, inagotable, por la cantidad de ángulos que ofrecen a intelectuales, ensayistas, periodistas, escritores, su trabajo literario, su defensa a las ideas libertarias y los matices de su propia vida.
Al coro de publicaciones aparecidas tras su reciente fallecimiento, se
suma «El Nobel y Arequipa», trabajo que reúne 47 textos, la mayoría de ellos
son aportes de autores e investigadores arequipeños quienes ofrecen
testimonios, opinan y estudian aspectos del «territorio Vargas Llosa».
***
Mario Vargas Llosa (MVLL) fue el artífice principal de la realización
de un Congreso Internacional de la Lengua Española (CILE) en el Perú. El X CILE
de Arequipa, que se desarrolló entre el 14 y 17 de octubre pasado, no solo fue
un programa académico. Vino acompañado de una serie de actividades culturales.
En ambos programas, la figura del autor de «La ciudad y los perros» fue una
estela ponderada por el propio rey de España Felipe VI. Hubo homenajes
formales, presentaciones de libros y reinauguración de la casa museo donde
nació.
«El Nobel y Arequipa» se presentó en este contexto del X CILE.
Dividido en ocho secciones, el libro da luces no solo de las querencias y de la
pertenencia del nobel peruano por la tierra donde nació. Porque aunque vivió
menos de un año en Arequipa, siempre llevó en el corazón esta relación gracias
a la memoria de la misma que hizo en forma permanente su familia materna.
Si hablamos de querencias, es importante el texto del periodista Jorge
Turpo Rivas («Un hipopótamo para Vargas Llosa»), que, desde la admiración,
narra cómo fue la visita del novelista a la Ciudad Blanca en marzo de 2011, a
meses de recibir el Premio Nobel de Literatura 2010. La crónica de Turpo junto
con «Vargas Llosa, el político. Más allá del bien y del mal», donde Gonzalo
Banda Lazarte, ensaya una mirada crítica sobre la apuesta vargasllosiana por el
liberalismo, son de los mejores escritos en el volumen.
En esa misma línea, Juan Carlos Soto aporta un texto sobre cómo fue el
proceso de la llegada de los más de veinte mil ejemplares de la biblioteca
personal del escribidor a Arequipa, la hoy famosa Biblioteca Regional Mario
Vargas Llosa, epicentro cultural de la urbe sureña. Tanto Soto como Alonso Ruiz
Rosas se encargan de contar los entretelones de cómo se gestó la llegada del
CILE a Arequipa: versiones que se suman a otras que hemos escuchado durante los
días de la cumbre del idioma. Pero la figura gravitante fue Vargas Llosa. Es
indudable.
***
Hay tres textos sobre los que me detengo por el carácter novedoso y su
aporte a las investigaciones vargasllosianas. El de José Antonio Villanueva
Salas, «La influencia de la Química en la obra literaria de Mario Vargas
Llosa»; el de Teresa Arrieta de Guzmán, «Vargas Llosa y la filosofía. Senderos
de libertad, amor y utopía»; y el de Rubén Collazos Romero, «Del ángulo de la
noticia a la novela».
En el primero, Villanueva suma al análisis de la narrativa
vargasllosiana desde los conceptos científicos. Para Vargas Llosa, dice el
ensayista, «la ciencia no es solo un campo de estudio, sino una forma de
enfrentar el caos humano». Animemos al autor a ampliar su investigación.
Por su parte, Arrieta propone una lectura filosófica, sobre el amor,
la utopía y la libertad, basada en el análisis, en gran medida, que hace sobre
«Le dedico mi silencio» (2023), la última novela que publicó MVLL.
El periodista Rubén Collazos postula que al haber sido formado como
periodista desde los 15 años, Vargas Llosa conocía los conceptos periodísticos
de «ángulo» o «pepa» con el cual una noticia puede generar mayor interés entre
los lectores. Para Collazos, el nobel peruano usó a lo largo de su carrera esta
estrategia del «ángulo periodístico» para contar sus novelas, encontrando el
personaje y desde dónde narrar los hechos. Por ejemplo, en «Conversación en La
Catedral» el protagonista es un frustrado Zavalita.
***
«El Nobel y Arequipa» también rescata una sección de entrevistas que
el propio Fondo Editorial de la Universidad Católica de Santa María había
publicado un año antes como «Vargas Llosa. XXI asedios» (2024).
Deliciosas entrevistas, como la del propio MVLL, la del diplomático y
escritor chileno Jorge Edwards. En otra,
el crítico Efraín Kristal desmantela la idea de la originalidad de los
representantes del boom latinoamericano. Jorge Eduardo Benavides sintetiza los
aportes narrativos del escribidor arequipeño más universal. El indiscreto
narrador español Juan José Armas Marcelo con su lengua sin ataduras comenta
esos detrás de cámaras que aportan, cómo no, a nuevas lecturas sobre el
intelectual, el escritor y el seductor que fue el creador de «La guerra del fin
del mundo».
Vargas Llosa también fue un animal político. Sumó a su carrera
literaria su defensa del liberalismo. Luis Bustamante Belaunde, quien fue
secretario nacional del Plan de Gobierno del Movimiento Libertad -la fallida
candidatura del novelista a la presidencia de la República-, resume en un
decálogo las ideas libertarias defendidas por MVLL poniendo al ciudadano en el
centro, apostando por la economía libre, el respecto a la propiedad y la lucha
contra la corrupción, entre otros.
Óscar Urviola Hani señala a Vargas Llosa como un defensor irrestricto
del estado de derecho. Y Manuel Briceño Ortega rescata al Vargas Llosa
preocupado por la formación de ciudadanos críticos, una labor que el peruano no
limitaba solo a la escuela, sino que decía era una tarea en la que se debería
de involucrar a toda la sociedad en su conjunto. Son lecturas que aportan a la mirada sobre el
frondoso territorio Vargas Llosa.
2 de noviembre de 2025
Ficha técnica:
Varios autores. El Nobel y Arequipa (Arequipa, Fondo Editorial de la Universidad Católica de
Santa María, 2025). Pp. 301.
(*) José Vadillo
Vila es periodista, escritor y cantautor. Ha publicado los libros Historias a babor (2003), Hábitos insanos (2013), Apus musicales. Héroes de la canción andina
peruana Vol. 1 (2018), El largo
aliento de las historias apócrifas (2022) y Mostros (2024). Como
cantautor tiene publicados los álbumes Elemental
(2002) y Primera parada (2016). Fue
redactor y editor en el Diario Oficial El
Peruano, director del Gran Teatro Nacional y trabajó como
editor y redactor en el X CILE de Arequipa.
Comentarios
Publicar un comentario